domingo, 5 de agosto de 2012
Buenos días mundo
¿Qué pasaría si algo se convirtiese en lo único importante de mi vida? ¿Y si lo jodiese todo con la única persona que me importara? ¿Podría algo ser peor que destrozar una promesa? Si tuviese a alguien tan especial y le fallase no sería capaz de reponerme. No me creo capaz. Vivo con el deseo de encontrar a esa persona especial, y con el miedo a hacerle daño. Hay días en los que ni uno mismo no sabe a qué está dispuesto a arriesgarse. Me quedan treinta y dos años para conseguir lo que quiero y no perder lo que quiera. Querer solo una cosa te hace perder la esperanza. Te hace esperar lo peor. No puedes pensar en que si no es una cosa es otra y que seguro que algún día tendrás algo que te haga feliz. No puedes pensar eso porque no hay opciones. Tienes que ganar la partida y solo te sirve un póquer de ases. ¿Por qué soy así? ¿Qué experiencias he tenido para convertirme en quien soy? ¿Nadie tiene una explicación? Quizás llegue un día en el que alguien venga y me diga que tiene la solución a mis problemas, que me entiende y me va a ayudar. Que sabe el porqué de mi vida y sabe como arreglarla. Cuando ves que puedes perder fácilmente la partida tiendes a verte viejo y solo, borracho y llorando por todo lo que no has tenido ni vas a tener. Si dentro de treinta y tres años estoy vivo y no tengo a esa persona recordad que en realidad estaré muerto.
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