martes, 21 de agosto de 2012

Superman

Tim Puños de Bala, el tío más rápido que había visto nunca en un combate. Tim Puños de Bala, el tío que le hizo KO a siete luchadores en una misma noche. Apodado el Gran Tim a partir de aquel día. Tim ganó mucha pasta gracias a la fama que consiguió, pero no eligió bien en que gastársela. Empezó comprándose un cochazo edición limitada, un coche alemán que no llevaba ni una semana en el mercado. Compró la casa de sus sueños y llevó a ella a las chicas de sus sueños. Pero empezó a pillar drogas y sus sueños se rompieron. Tim Puños de Bala, el tío que más veces he visto desintoxicarse y recaer. La cocaína la consumía para los combates, vacilaba a su contrincante y le escupía tras ganar. Perdió todo respeto por la gente y las vidas ajenas. Bebía un jarabe infantil, siempre llevaba un vaso con esa mierda destroza hígados. No se pinchó más de tres veces, pero mezclaba y estuvo a punto de morir tres veces. Las pastillas no le gustaban, decía que eran para maricas. Un niño me dijo que si podía conseguirle un autógrafo de su héroe, Tim Puños de Bala, y le dije que Tim no debería ser héroe de nadie, que era el villano de la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario